La piel de la cara es muy delicada y requiere de cuidados diarios así como de una alimentación sana y equilibrada.
Se le debe mantener limpia e hidratada, además de protegerla y nutrirla de forma tópica y comiendo balanceadamente.
Para su limpieza es mejor utilizar jabones suaves, ya sean neutros o enriquecidos con miel de abeja y glicerina.
Después de la limpieza se aplica un suero hidratante y finalmente la crema de tratamiento.
No se debe dormir maquillada, ya que esto acelera el proceso de envejecimiento y produce imperfecciones.
Para una piel hidratada y lozana, aplica el Suero Facial dos veces al día, incluye el escote, cuello y área de los ojos.
- Suaviza, hidrata y unifica el tono de piel
- Contiene más de diez activos en perfectas proporciones
- Se ajusta a la piel grasa
- Humecta todo tipo de piel
- Aporta luminosidad y firmeza
Complementa tu rutina de belleza tomando suficiente agua y consumiendo frutas y verduras frescas; además de mantener la piel con los niveles óptimos de humedad, ayuda a eliminar toxinas.
Los alimentos grasos ayudan a mantenerla nutrida y firme, algunos de los más importantes son el aguacate, el aceite de oliva extra virgen, las semillas y los frutos secos.
Para generar una acción antioxidante, la vitamina C es óptima. Su consumo se relaciona con la producción de colágeno que se encuentra en tomate, kiwi, melón, cítricos y pimientos, entre otros muchos productos.
Comentarios recientes